Poema: Mi vida sabor a limón
Autora: Anita Topapori
Aquella noche me desperté, me temblaban los pies. Tras de mí, sólo sombras,
“tristes recuerdos que al cruzar me encontré”
Corría de prisa, el corazón latía con más fuerza, mis manos eran frías, mi cabeza daba vueltas,
“tristes recuerdos que al cruzar me encontré”
No dejaba de correr, corría en busca de ¡dios sabe qué! Huyendo de ¡dios sabe quién!
“tristes recuerdos que al cruzar me encontré”
Me veía en un desierto, no había nadie, yo, caía y me levantaba y jamás paraba de correr.
“tristes recuerdos que al cruzar me encontré”
Desvanecía, estaba decidida, usaría mi último aliento para sobrevivir si el destino lo requería,
“tristes recuerdos que al cruzar me encontré”
Por un instante sentí que era un sueño, rechinaban mis dientes, yo no me detenía,
“tristes recuerdos que al cruzar me encontré”
Fue así como aprendí que, en el crucero de la vida, somos pasajeros independientes,
con diferente camino y diferentes opciones.
Gente que comparte un mismo espacio, pero que apenas se ve, estamos completamente solos,
“vanidad banal del vivir”