Blanca Montenegro
"...si saber describir con minuciosa paciencia selectiva, así como poder narrar los acontecimientos con la necesaria fluidez, y además lograr meterse en la mente de determinados personajes como una forma de entender sus fobias, sus esperanzas, sus comportamientos cotidianos e interacciones con los demás personajes, son facultades propias de los buenos hacedores de ficción literaria, resulta entonces que con este primer libro Blanca Montenegro (1982) va camino a serlo por derecho propio, enriqueciendo de paso el conjunto de las nuevas letras panameñas; esas hoy denominadas letras emergentes".
Fragmento del prólogo por Enrique Jaramillo Levi