por Hugo J. Vélez Astacio de Nicaragua
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Estando Rubén Darío en Chile, como redactor del diario La Época, un día se apareció el Director don Eduardo Mac Clure, indicando que se requería algo muy bueno a ser publicado junto a una colaboración que había enviado el grande español Don Ramón de Campoamor. Ofreció un buen premio al ganador. En breve tiempo, ante una décima por demás fabulosa Darío resultó ser el premiado:
*CAMPOAMOR:*
Este del cabello Cano
como la piel del armiño,
junto su candor de niño
con su experiencia de anciano,
cuando se tiene en la mano
un libro de tal varón,
abeja es cada expresión
que, volando del papel,
deja en los labios la miel
y pica en el corazón.
Poema que tuvo en un contemporáneo una simpática replica que provoco por su humor agrado y algunas sonrisas:
*CAMPOAMOR*
A este del negro cabello
como la nocturna bruma,
pùsele Dios en la pluma
luz de sideral destello.
Cuando de su verso bello
nos llega la vibración
se escuchan con gozo, al son
de músicas orientarles,
melodías atabales
de las selvas de Colon.
Darío como homenaje a Don Ramón, le visitó en su primer viaje a Madrid, en 1892. Campoamor dado a reconocer, con natural sentimiento le calificó entonces de «amable y jovial filósofo», de «risueño moralista».
Y todo a pesar que a Campoamor muy poco le gustaba en vida ser reconocido y menos tributos de estatuas en mármol. Él era reacio a aceptar condecoraciones y premios, con un estilo de realismo literario que no compartía la belleza idealizada dado a una lengua llano y castizo no afecto al movimiento modernista. Pero por encima de todo eso, Rubén era además de caballero, un artista que apreciaba lo dulce de los buenos escritores.
Información de citado
Hugo J. Vélez Astacio, 12/03/2023, Poema a Ramón de Campoamor y una simpática réplica, Blog de Panamá Poético https://panamapoetico.com/blog
Sobre el autor y el traductor de la nota
Escritor e historiador